Afianza Tu Relación De pareja Con Los Amarres De Amor De Mariela Gauna

Dentro de la rueda del zodíaco todos los signos cuentan con una gran cantidad de aspectos positivos que los hacen únicos y originales. Pero así como suele suceder que gustan por esos buenos y bonitos valores también tienen la otra cara de la moneda, caracterizándose en forma de defectos, en donde por supuesto que uno se destaca por encima del resto para volverlo el famoso punto débil o talón de Aquiles de cada signo.

En este caso hablaremos del signo más desapegado del zodíaco, Acuario, el cual pertenece al elemento aire y es uno de los cuatro signos fijos. Su mayor aspecto negativo radica en su desapego emocional y la frialdad con la cual mira a otras personas y que le hace ser considerado cruel en ciertas situaciones en donde se amerita más tacto y prudencia sentimental.

Acuario si bien es cierto que conforma junto a Libra y Géminis a los denominados signos de aire tiene una particularidad de ser ya mucho más frío que los otros dos compañeros de elemento y esto se torna un problema para demostrar sentimientos tan básicos como reírse o hasta el propio afecto que siente por las personas más cercanas. Es tal el desapego que muestra que son muchos los que pueden considerar a un nativo del signo del aguador como alguien muy distante y con el cual no se pueden entablar temas amorosos y emocionales.

No solamente el ser tan desapegado tiene una ascendencia especial en Acuario, también la libertad que este necesita le hace no establecer vínculo para una posible relación de compromiso real, como el matrimonio por ejemplo. El querer sentirse tan libre le juega malas pasadas cuando hablamos de las relaciones personales, no solamente amorosas y es que a este signo poco o nada le interesa el control que posea sobre las emociones, dejando ver su cara más rebelde y hasta testaruda cuando algo le molesta, así pues es uno de los más incomprendidos de todo el zodíaco, lo que no en pocas veces le sitúan en el mismo grupo que a los locos o rebeldes sin causa.

Un Acuario cuando se siente incomprendido o bien demasiado atado (sobre todo en relaciones de pareja) puede ser demasiado cortante y hasta impredecible, dejando unas situaciones de lo más incómodas para quienes tienen la desdicha de soportarlos cuando se encuentran en este estado (que no son pocas las veces).

Para este signo su libertad emocional y física es tan necesaria como beber agua o respirar el aire fresco y esas amenazas en forma de ataduras con compromisos los suelen poner en dilemas mentales, que junto a su capacidad analítica es terrible al tener que pensar a diestra y siniestra en este tipo de situaciones que le pueden suceder.

Para los acuarianos y acuarianas el hecho de demostrar las emociones es sinónimo de bajeza como también de debilidad, a tal punto de que muchas veces no se sabe lo que está pasando por la cabeza de un nativo o nativa de este signo en situaciones de cualquier tipo de situaciones, como donde se amerita estar alegre, triste o hasta sorpresa. Puede ser incluso un aspecto positivo si se toma en cuenta que así puede regular mejor su comportamiento, pero con Acuario no hay grises y lo puede llevar con facilidad al extremo de hacerlo a diario.

Como veníamos adelantando, en el campo de las relaciones amorosas esto es fatal ya que en muchas ocasiones su pareja nunca sabrá qué tanto realmente Acuario las quiere, ya que no tienen un termómetro fácil de indicar en cómo vive un determinado momento a diferencia de otros signos mucho más demostrativos como Escorpio, Cáncer o Leo.

Es bastante común que un Acuario sienta la necesidad de conseguir algún tipo de estabilidad emocional con una pareja o con un círculo de personas de confianza, sin embargo el hecho tal es que tan pronto como inicia su aventura se empezará a sentir cada vez más ataviado y extrañará los momentos que anteriormente tenía de libertad, lo cual es una gran contradicción para un signo que busca tanta compañía como soledad a lo largo de su vida. Después de todo no es de extrañar observarles en una fiesta repletos de personas pero sintiéndose completamente solos en el fondo, así de complicado puede ser un Acuario.

Esta capacidad de Acuario les hace ser muy complejos en su interior, pero que realmente no tienen facultades para expresar correctamente a sus emociones, por eso es que difícilmente se les escuche decir frases como “te quiero” o “te amo”, las cuales reserva para esas personas que en su imaginario algún día pueden llegar a hacerles falta comentarles para que estén a su lado. El problema es que eso no pasa prácticamente nunca en la vida de un acuariano.

La elección de Acuario por ser una persona desapegada es sinónimo del miedo que tiene frente a perder todo lo que respecta con su libertad, y además todas las actividades que puede realizar en compañía de su propio ser interior. No es que en esencia sea una persona con pocos sentimientos, simplemente no puede demostrarlos como cualquier otro signo del zodíaco incluyendo a sus pares de elementos como Libra o Géminis.

Otro de los aspectos que le dan una mala fama a Acuario es que tiene una confianza excesiva en su intuición y eso combinado con su nivel de libertad interior es una bomba contra cualquier pronóstico. Por ejemplo, al observar una situación que no le agrada lo más normal para este signo es dejarse llevar por lo que le diga su cabeza y lanzarse sin más, siendo curiosamente el efecto contrario que busca con sus emociones que es volverse impulsivo.

Ante esto, siempre se deja llevar por cualquier tipo de escenario en donde su cerebro calculador le dice que no está bien y puede cortar de raíz tan rápido como decirlo, por eso esto le puede hacer mucho daño y traerles consecuencias tanto a ellos mismos como a los demás. Si normalmente una persona no le parece lo suficientemente confiable es muy probable que se lo diga en su cara o si no lo hace terminará por actuar irracionalmente y alejarse para luego darse cuenta que esa persona era otro tipo de ser que no tenía nada que ver con sus conceptos preconcebidos.

Gracias a la falta de emociones y sentimientos que lo caracterizan en cuestiones de amor, escucha solamente a su mente fría y para nada es bueno ya que terminará por alejar a las personas que realmente lo quieren. En muchas oportunidades se observa como Acuario no escucha a sus sentimientos, los deja de lado de forma casi robótica y se compromete con errores a futuro que nada bien le viene. Esto es el motivo por el cual su gran libertad le juega en contra, recuerda que mientras más alto se vuele más dura será la caída.

Acuario y su libertad le proponen un mundo lleno de ficción que en la vida real no se aplica en muchas de las situaciones que quiere emular de su cabeza hacia la realidad que tanto desea. De esta manera el ser muy soñador le puede servir para plantearse metas muy altas pero no con la misma claridad que se requiere para tener un temple de acero frente a los problemas e inconsistencias que se puedan dar a lo largo del camino.

Por eso el vivir con los pies puestos sobre la tierra puede ser algo complicado para este signo en donde más tarde que temprano termina por chocar con la realidad, así que se tienen que preparar para todo tipo de escenarios si no quieren terminar decepcionados, o bien de alguna persona o de algún objetivo que se trazaron desde hace mucho tiempo.

Si se quiere empezar por componer un estado de ánimo balanceado, Acuario, debes aprender que toda libertad tiene límites por muy alto que sea el techo a tocar y que en el mundo real en donde vives el querer llegar más alto requiere de una conexión con las emociones que casi nunca tienes. Si lo que se busca es plasmar emociones no hace falta decirlas en público cada vez que le pasan por la cabeza, pero tampoco ser tan frío y racional frente hasta alguna sonrisa que puede resolver cualquier problema. Ese es el mayor punto débil del signo del aguador, miedo a las emociones y cortar su libertad.